El paso migratorio postnupcial de los limícolas ya ha comenzado.
Así pues, esta mañana nos vamos a la marjal de Silla a ver que podemos
pillar, fotográficamente hablando, de tan apasionante acontecimiento.
A grandes rasgos se denomina paso postnupcial, al viaje migratorio que
emprenden las aves desde sus áreas de reproducción hacia sus cuarteles de
invierno. Para las aves acuáticas, el eje mediterráneo es una buena ruta por la
abundancia de zonas húmedas que encontraran por el camino.
Este viaje no se hace de tirón, sino que van parando en las zonas
adecuadas para alimentarse y descansar. Esto propicia que durante todo el mes
de septiembre el flujo de aves acuáticas en paso sea grande, tanto en número
como en variedad de especies.
Plantear sesiones durante este periodo orientadas a estas aves
migratorias es una actividad emocionante, pues las aves pueden variar casi a
diario y la sorpresa de avistar alguna especie rara puede saltar cualquier día en
que menos te los esperes.
Lo que hemos pillado esta mañana no ha sido espectacular, pero ya se
nota que algo se mueve. En unas tres horas de sesión hemos podido fotografiar
agachadiza común, correlimos menudo, andarríos bastardo, cigüeñuela, morito y
garceta común. Y aunque no su pusieron a tiro, también observamos andarríos grande,
chorlitejo grande y fumarel cariblanco.
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