viernes, 27 de septiembre de 2019

MILANO NEGRO


El milano negro es una rapaz de mediano tamaño y coloración general bastante oscura se caracteriza por poseer unas alas más bien largas, así como una larga cola ahorquillada, si bien bastante menos que la de su cercano pariente, el milano real, que ofrece un aspecto más estilizado y es de mayor tamaño.
En Europa, sus poblaciones son estivales, invernando predominantemente en África. En España, el milano negro sólo nidifica en territorio peninsular, aunque es particularmente raro en el cuadrante suroriental de la Península.
En general, selecciona áreas no demasiado arboladas siendo capaz de soportar grados moderados de perturbación humana, especialmente los relacionados con usos agropecuarios extensivos, como dehesas dedicadas al ganado o campiñas agrícolas. 
Sus preferencias alimentarias están presididas por el más absoluto eclecticismo, por lo que en su dieta se incluyen las más variadas presas, desde pequeños roedores hasta conejos, además de aves, anfibios, reptiles, peces y grandes insectos. Dado que sus capacidades predadoras no son muy notables, es frecuente que capture, sobre todo, presas disminuidas, enfermas o jóvenes. De hábitos marcadamente carroñeros, esta rapaz se encuentra muy ligada a la existencia de basureros, muladares, granjas, pueblos y, en general, a cualquier actividad humana que le pueda proporcionar alimento fácil, como sucede en las carreteras, que el milano patrulla incansablemente a la búsqueda de las víctimas ocasionadas por el tráfico rodado.















martes, 24 de septiembre de 2019

MUCHOS POLLOS Y ALGO DE PASO POSTNUPCIAL


Pasa el tiempo y llegan los cambios de estación. Después de los procesos reproductivos de las aves, llega el otoño y por lo tanto se inicia el fenómeno de la migración.  
En Almenara ya se notan estos cambios. Hay abundancia de jóvenes inmaduros (sobre todo pollas de agua, fochas, cigüeñuelas, patos y calamones) y se puede ver algo del paso postnupcial de los limícolas (andarríos, chorlitejos y archibebes). Asimismo algunas especies que criaron aquí este verano ya no están o su presencia es muy escasa (fumareles, martinetes, avetorillos, etc.). 
También van llegando las rapaces, y los laguneros ya se dejan ver de forma más o menos esporádica.     


Archibebe oscuro




Anadarrios bastardo

Andarrios grande

Chorlitejo chico


Correlimos menudo
Joven de focha




Joven de cigüeñuela


Joven de polla de agua



sábado, 21 de septiembre de 2019

ENTRE LA BRUMA


En esta ocasión vamos a visitar el Parque natural del Desert de les Palmes para ascender al Bartolo, a la Mola del Morico y al Alt de Colomer, y recorrer un largo trecho de la cresta de esta bella sierra litoral.
Con una extensión de unas 3.000 hectáreas, su vegetación se encuentra en regeneración después del grave incendio que lo arraso en 1992. Actualmente la mayor parte de su superficie está ocupada por un rico matorral mediterráneo, con algunos bosques de pino rodeno y carrasco y presencia muy escasa de carrasca y alcornoque.
La ruta propuesta es de cierta dureza (17 km y unos 850 m de desnivel) pero vale la pena porque asciende a sus cimas más significativas a través del cordal de la sierra en un recorrido de dilatadas panorámicas y atravesamos algunos de los sectores forestales supervivientes. 
Precisamente hoy no ha sido un buen día para las panorámicas, pues una densa neblina procedente del Mediterráneo ha envuelto a cimas y valles, aunque no hay mal que por bien no venga, porque así hemos podido disfrutar de un paisaje muy sugerente y casi mágico.