La cigüeña negra es un ave zancuda de gran tamaño muy parecida a la cigüeña blanca, aunque el plumaje del cuello y el dorso es de color negro con reflejos verdosos y azulados. Plumaje ventral blanco, patas anaranjadas, pico rojo y anillo ocular también rojo.
Se reproduce en el cuadrante suroccidental de la Península, repartiéndose su población nidificante entre Castilla y León, Extremadura, Madrid, Castilla-La mancha y Andalucía, siempre en entornos próximos a medios acuáticos y cortados rocosos.
Si bien la mayor parte de la población es migrante (pasa el invierno en el continente africano, al sur del Sahara), se registran pequeños núcleos invernantes en Doñana y su entorno, en determinados embalses de Extremadura y en el valle del río Tiétar.
Sin embargo, la presencia invernal de cigüeña negra en el marjal de l’Albufera es un fenómeno que se viene repitiendo con cierta regularidad los últimos años y en particular desde el año 2006, aunque siempre en muy bajo número.
Así pues, esta mañana hemos tenido mucha suerte de encontrar un ejemplar joven de la especie y que se haya puesto a tiro de foto, pues es una especie muy esquiva y desconfiada.
Es un ejemplar joven y quizás por ello nos haya dejado acercarnos lo suficiente para hacerle unas cuantas fotos decentes.







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