jueves, 28 de agosto de 2025

ESTRENANDO HIDE EN MOTILLA

La Manchuela Conquense se ubica en el sureste de la provincia de Cuenca. En la zona de contacto entre el ibérico y las planicies de la sub-meseta sur en la región ligeramente ondulada que forma parte de la región natural de la “Manchuela”, compartida por las provincias de Albacete y Cuenca, entre los ríos Júcar y su afluente.

Sin duda alguna el mosaico de cultivos de cereal, viñedo, almendros, olivos y bosquetes de pino piñonero o pino carrasco puede considerarse como el paisaje típico y definitorio de la Manchuela Conquense. Este es un paisaje ligado a una explotación tradicional y más o menos sostenible del territorio, basado en muchos casos en actividades y técnicas vinculadas a la agricultura de la comarca.

Esta mezcla de ecosistemas enriquece la variedad ornitológica de la zona, pues será punto de encuentro de especies ligadas a la cercanía del hombre y sus cultivos con especies típicas del monte mediterráneo.

En este contexto vamos a estrenar un hide en Motilla del Palancar y del que esperamos disfrutar de muy buenas sesiones.

Pues no íbamos nada desencaminados, probamos una sesión y el resultado ha sido espectacular. En apenas 4 horas y media, estas son las especies que han entrado: Mirlo común, verderón, pardillo, jilguero, pinzón vulgar, escribano soteño, ruiseñor común, papamoscas cerrojillo, curruca carrasqueña, torcaz, picogordo, totovía y el sorpresón de la mañana: una bellísima águila calzada de morfo claro.

Como única pega es que es un hide orientado a luz de invierno y ahora la luz es lateral, lo que, en un entorno de pinar más o menos cerrado como este, hace que haya un juego de luces y sombras a veces complicado se manejar.




























domingo, 24 de agosto de 2025

BUHO CHICO

El búho chico es una rapaz nocturna de mediano tamaño que se caracteriza por presentar un plumaje extremadamente críptico, de color marrón ocre con intensidad variable, que se extiende desde los tones crema hasta el marrón oscuro, salpicado en el pecho por manchas y lágrimas oscuras. Uno de los principales rasgos distintivos en su cabeza es la presencia de unos penachos faciales muy destacados, que le permiten difuminar su silueta y mejorar su camuflaje mientras descansan durante el día en las ramas de árboles.

El búho chico, aunque depende estrechamente de las formaciones boscosas para criar, prefiere zonas con arbolado disperso, bosquetes-isla y sotos ribereños, y se instala junto a claros y linderos si se trata de un bosque muy extenso. La especie siente especial predilección por los pinares, asentándose incluso en los de repoblación.

Como el resto de rapaces nocturnas, el búho chico no construye nido alguno, por lo que ocupa nidos abandonados de otras especies, como ardillas, palomas torcaces, córvidos u otras rapaces diurnas.

Aunque sus hábitos son nocturnos, suele cazar al amanecer, incluso, aunque raramente, a pleno día. Lo hace en terrenos despejados y tierras de cultivo.

Sus principales presas son roedores, sobre todo ratones, pero también topillos, aunque en invierno depreda también sobre pequeñas aves.