La tórtola europea es un ave colúmbida, esbelta y de
pequeño tamaño. Tiene un plumaje muy vistoso y es la más pequeña de las
palomas. Mezcla en sus alas los colores marrones, negros y ocres, que le dan un
aspecto muy llamativo. El pecho es de color rosado y el vientre blanco, llamando
poderosamente la atención la mancha orbital de color rojo.
Es un ave migradora de largo recorrido. Es una
especie estival en toda su área de distribución europea, con áreas de invernada
situadas en el África tropical, al sur del Sáhara. En España, a la población
estival reproductora se unen aves en migración procedentes de Europa central y
oriental.
Es una especie con gran tradición cinegética y ahora
que a mediados de agosto se abre la media veda en España, se ha convertido en
el centro de una fuerte polémica entre los cazadores y la administración. De
hecho, este año va a estar prohibida su caza, pero esto solo es un parche, queda
pendiente la resolución definitiva al problema de esta especie que presenta
unas poblaciones muy diezmadas por causa de la caza y que si no se resuelve
adecuadamente puede quedar al borde mismo de la extinción.
A causa de la caza desaparecen anualmente en Europa
casi el 13% de la población de tórtola europea en su ruta migratoria occidental
(desde Alemania y Gran Bretaña hasta España y Portugal e invernando en África
Occidental).
Sólo en España se matan todos los años más de
700.000 tórtolas lo que supone una mortalidad no natural insostenible en una
especie que ya presenta una tendencia muy negativa y que ha provocado que su
población se haya desplomado en un 40% en tan solo una década.
Un reciente estudio publicado en la revista
científica ‘Diversity and Distributions’ revela que la población de tórtola
europea (Streptopelia turtur) ha sufrido un importante declive poblacional en
toda Europa, de hasta un 78 por ciento, y especialmente pronunciado, el 75 por
ciento, en la ruta migratoria occidental de la especie que incluye España, que
alberga hasta al 40 por ciento de la población reproductora total.
En 2018, la Comisión Europea, aprobó un plan
especial para esta ave. En él incluía la moratoria de su caza hasta que los
estados aseguraran unos niveles de caza sostenibles. Su caza no se prohibía,
pero instaban a los países a evaluar el estado de esta ave en su territorio y
trazar una estrategia para que la población de la especie no siguiera
desplomándose.
En España no se hizo ninguna evaluación al respecto
y no se paró ni disminuyo la caza de esta ave hasta que, en julio de 2019
Bruselas expedientó el país por su inactividad.
La Comisión Europea emitió un dictamen el pasado 3
de diciembre de 2020, dirigido a España, en el que ese organismo comunitario asegura
que se ha incumplido una directiva de conservación de aves silvestres y cazado
en exceso ejemplares de esta especie y que las autoridades carecen de
herramientas para controlar con efectividad los cupos de capturas que autorizan.
El Gobierno español comunicó a la Comisión la
voluntad de asumir las conclusiones del dictamen sobre la tórtola común que
establecieran los científicos sobre la gestión de la tórtola a nivel europeo.
El citado consorcio científico recomendó a los estados miembros del corredor
migratorio occidental suspender la caza a través del establecimiento de una
«cuota cero» reversible en función de la evolución de criterios poblacionales y
técnicos. Ese es el motivo por el que las comunidades autónomas se han visto
obligadas a establecer un “cupo cero de capturas para esta especie”.
Organizaciones conservacionistas como SEO BirdLife
valoran esta decisión de implantar la «cuota cero», pero apremian al
Gobierno de España y a las comunidades autónomas poner en marcha más medidas
para asegurar la conservación de la tórtola europea, una especie amenazada y en
declive poblacional. Piden que se catalogue como “especie vulnerable”, lo que
implicaría de forma automática la prohibición de su caza en todo el territorio
español.
«Una cuota cero de un año es solo un parche. Ni
siquiera una moratoria más a largo plazo, de cinco años, será suficiente. Debe
recordarse que la reducción drástica de la presión cinegética es solo una
medida de emergencia, obligada en especies con tendencias tan desfavorables. Es
preciso adoptar un plan a escala nacional que permita una gestión adecuada de
los hábitats de la tórtola porque es allí donde se acumulan los problemas,
estamos dejando a la tórtola, y a otras especies emblemáticas de nuestros
campos como la codorniz, sin espacio», señala Asunción Ruiz, directora
ejecutiva de SEO BirdLife.
Esta mañana visitamos un hide en Segorbe que se
encuentra en un claro del pinar y la agradable sorpresa de que ha entrado un
grupo familiar de 5-6 tórtolas europeas y bien que las he disfrutado, mas
sabiendo que por fin van a tener una temporada de caza placida y a salvo de
tiros.
Acompañando a las tórtolas, aparecieron las típicas
aves forestales como carboneros, mirlos, pinzones, escribanos, etc. y un par de
ardillas. También una lagartija colilarga que se puso las botas con los
tenebrios que eche a los pajarillos.